A la hora de implementar un programa de cumplimiento normativo, nos encontramos con ciertas barreras, la más habitual, es ser percibidos como un cuerpo especial de policía realizando acciones de espionaje, asociadas a una mayor carga de trabajo y a un gasto más que añadir al presupuesto.
La implementación de un programa de cumplimiento normativo dinámico y eficaz ha de entenderse como una inversión, una necesidad en cualquier entorno de negocio sin importar el tamaño de la empresa o, si el sector está o no regulado. Es una clara ventaja competitiva, supone la exención de responsabilidad penal de la persona jurídica pero también innumerables beneficios:
- Permite la revisión de procesos y controles implementados en la organización, con posibilidad de mejorar su eficiencia
- Permite la prevención y detección de posibles fraudes internos
- Reduce costes (sanciones, multas, contratación de pólizas de responsabilidad civil, etc)
- Facilita los contratos con terceros (administraciones públicas, multinacionales, etc.)
- Apoya la captación de clientes y su fidelización
En Keepers Compliance trabajamos con un equipo multidisciplinar donde las exigencias de la autorregulación, se encuadran desde el punto de vista de la realidad empresarial, ofertando una serie de servicios totalmente personalizados y adaptados a cada uno de nuestros clientes. La pasión por nuestro trabajo hace que cada proyecto sea un nuevo reto para mejorar.